Sobre las golosinas

Mi amigo el mono es un dandy calórico. Va degustando nuevas golosinas que otea en los kioscos, en particular los chocolates y sus derivados. Debo aclarar que el tipo pronuncia Shot con doble T y S final, como apropiándose de lo que, a su entender y paladar, es el mejor chocolate jamás realizado. Otro punto a su favor, me introdujo en el mundo Cachafaz -sin dudas la gran aparición del último lustro-. Siguiendo su hábito me dejé llevar por la madalena de Vauquita, un bocado mortal. 
Lo cual me lleva a pensar en la teoría de mi amigo Meschengieser. Según él, las pymes argentinas no deben extenderse demasiado en sus producciones, cuando El Abuelo empezó a hornear facturas de todo tipo, pan y no sé si llegaron a sacar pebetes, empezaron a desbarrancar. Recién ahora pudieron recuperarse gracias al 'back to basics'. Bueno, acabo de comprar el Cachafaz de chocolate blanco. Con los recaudos explicitados llevaré el alfajor a mi boca luego de la cena. Habrá novedades.