Famosos por...

Hace algunas semanas alquilé "Brüno", la nueva comedia de Sacha Baron Cohen. Una escena me hizo reir muchísimo, el gag es así. El fashionista catalogado de OUT va a una reunión con unas californianísimas hermanas gemelas, relacionistas públicas ellas, para mejorar su imagen. Le recomiendan meterse en alguna acción social: "El calentamiento global es cada vez peor...involucrarse con algo, ayudar al Este, o a África, para mejorar nuestro futuro, eso es lo más beneficioso hoy en día", señalan.

Las campañas de "famosos contra", "celebridades concientizan", no son ajenas a nuestro entorno. Basta salir a la calle para ver el rostro de Nico Pauls alertando sobre las mujeres golpeadas, Luciana Salazar en una imagen del calendario ecológico de Gaby Herstein, o a Natalia Oreiro en un spot de Greenpeace. Sus caras de poker, en la mayoría de los casos, advierten al "ciudadano común" a tomar partido, porque ellos "famosos y todo" ya lo hacen.

No soy escéptico de las manifestaciones políticas informales; considero que la política personal es importante (no la única); tampoco voy a descreer de la voluntad de una persona de donar su tiempo para una acción que considera justa; y quién puede dudar de los fines si estos son a beneficio (aunque uno puede disentir de ONG's que funcionan con lógica empresarial). 

La Fundación Huesped, que ha utilizado esta forma de campañas, lleva a cabo una tarea mucho más valiosa que cualquier crítica hecha desde un blog. Lo que me revienta es el facilismo, la frivolidad teñida de ironía y pragmatismo, y el valor fama como un plus en sí mismo, de estas prácticas mediática-políticas. "Ah no, ahora al ver las tetas de Luli Love y sus labios botoxeados mordiendo una tarjeta de crédito voy a meditar sobre el consumo excesivo". Me quedo con Batata Clerc jugando con Emilio Disi en "Tenis por la vida" que sin hacer una bajada de línea tan barata, ayudaban y te hacían cagar de la risa.

No debe, ejem...debo, caer en el relativismo. Esa foto está a años luz del compromismo del flaco Spinetta, poniéndole todo el lomo a "Conduciendo a Conciencia"

Pero, en la mayoría de los casos, debajo del manto de "acción" se soslaya la actividad diaria de cientos de militantes, de esas mismas organizaciones incluso. Hay otras que con menos visibilidad mediática, ¿con menos famosos envueltos?, realizan una tarea minúscula hermosa como Madres contra el Paco, FUDE o Mujeres en Igualdad.

Creo en el lema de HGO "el único héroe válido, es el héroe en "grupo", nunca el héroe individual, el héroe solo".

Oficina anti argentina

En el cuento "Mi amigo Mickey" del libro Usted no me lo va a creer, el negro Fontanarrosa imagina la historia de un argento que en el lobby de un aeropuerto conoce a un norteamericano. El yanqui es agente de una oficina Anti Argentina llevada adelante por el pentágono para impedir que se concrete el supuesto "destino de grandeza" mencionado en varias ocasiones en Inconcluso. El tipo se pasa de whisky y le comenta al rosarino varado en Lisboa los complots contra nuestro país: las zonas de la muerte en los mundiales, el bidón de nafta y Reutemann, hasta Fangio y Gatica están metidos en el entuerto.

Negro querido, dónde estés, hay un nuevo integrante de dicha asociación.

Y por favor gente de Clarín, cambien de una vez por todas la foto del juez que cual Tío Sam -con su misma mirada aguileña, trocando el dedo por el martillo confiscatorio- parece decir: "I want you..."

London Calling

Hoy salió un artículo de mi autoría en Página 12. Es sobre los 30 años de London Calling de The Clash. Hay entrevistas varias e incluso una a Don Letts. Sin falsa modestia, elijo una frase:
"The Card Cheat: Elvis Costello hubiera dado sus anteojos por ese piano que diluvia entre épico y new wave".  

A ver si concuerdan...

Judy y Rufus

Es usual que me ocurra. Será que uno está a la caza de información con las antenas bien paradas, atento a que cada dato que circule a nuestro alrededor sea vital. Cada vez que estoy escribiendo un artículo, y en especial cuando es sobre algún personaje, comienzan a llover hechos relacionados con ese tema o sujeto. Ayer me sucedió nuevamente. Estaba escribiendo una nota sobre la vida de Judy Garland, freno un toque para refrescar la cabeza, tomo una revista de música y abro justo en una página con un artículo sobre el disco "Rufus does Judy at Carnegie Hall". El homenaje del cantautor y crooner a la chica de los zapatos rojos y su célebre recital. 

Duro como Hackman

Quedé prendido con el último post. Tanto que decidí incorporar una sección al blog y se referirá a personas reales o ficticias que merecen el título 'Duro como Hackman' por su hosquedad, fortaleza y un raro sentido del bien (o del deber) en determinadas acciones. Va la primera: Mi papá explicándome matemáticas durante varios domingos de mi infancia y adolescencia. Tablas, la punta de los lápices sacada con Gillette y su mezcla de sangres italianas y ucranianas a pleno hervor.

Duro como Hackman

Una de las máximas pasiones de mis amigos es hablar sobre cine. Tienen, tenemos, gran capacidad de memoria e incluso algunos como Diego y el Chicho son muy buenos imitadores. Más que de tal o cual película, nos referimos a una escena, frase, mirada, y -obviamente- algún personaje. A veces viene todo en un solo combo, como Bill 'The Butcher' -encarnado por Daniel Day Lewis- en "Pandillas de New York" lanzándole al tiernito de Di Caprio "What's up boy?" mientras tantea su ojo de vidrio con un cuchillo. Tenemos nuestras figuritas repetidas como "El crimen Ferpecto", "El Gran Lewosky", "Koyaanisqatsi", "El amanecer de los muertos", "El padrino" o "X-men", aunque ayer la discusión, más bien la entronización, se la llevó Gene Hackman.

¿De dónde saca la fuerza este tipo?. Esa mirada que congela todo a su alrededor. Una presencia física, y no de músculo trabajado en un gimnasio (mide lo mismo que Saddam Hussein, Eric Cantona y Johnny Cash). Además de rememorar films y personajes con su firma ("Contacto en Francia"; "Mississippi en llamas -donde agarra de los huevos a un tipo, "Los imperdonables"), también nos acordamos de otras actuaciones más raras y cómicas, pero que muestran su versatilidad, como el ciego de "El joven Frankenstein"; "Los Excéntricos Tenenbaums" -creo que Wes Anderson escribió el papel del patriarca con Hackman en mente-; y su Lex Lutor de "Superman"   

Estamos hablando de alguien que le dijo que no a Spielberg en "Tiburón", también se rehusó a hacer del Dr. Lecter y estuvo a un paso de ser Tom Hagen -yo señalé que debería haber hecho de Sarmiento-. Además del carácter (en el diccionario al lado de la definición debería estar su cara) otro de sus puntos altos es la uniformidad en la vestimenta. Denle una camisa blanca y una corbata chamuscada y listo. Todos lo recordaron con polera, según Diego en "Poseidón" no se la saca ni cuando se hunde el barco.

Finalmente surgió un planteo: ¿Quiénes serían competidores de fuste en un mano a mano contra Gene Hackman?. Se nos ocurrieron estos:

Michael Caine como ese James Bond del proletariado llamado Harry Palmer

Kirk Douglas

Richard Harris

Y uno de la nueva camada: Clive Owen

Teléfonos sin 4 adelante

Tras meditarlo largamente, decidí pasar los números telefónicos anotados en las últimas cinco agendas anuales, sumado a los de una bastante baqueta que tenía incluso números sin 4 adelante. La idea había nacido del quilombo que implicaba encontrar algún teléfono en toda esa maraña de anotaciones. Hacia agosto de 2009 compré la agenda en imagen, aunque recién ayer empecé a copiarlos -mezcla de falta de tiempo y energía para emprender la empresa-. Antes de anotar el primero surgió una duda: ¿cómo pasarlos? ¿por nombre o por apellido? ¿separarlos por trabajo y amistades? ¿y los que tienen apodo? ¿primero el celular o la casa?

Me sentí tan desdichado y enfermizo como John Kusack en "High Fidelity" ya que, además de lo contado arriba, por embadurnarme con tantos nombres y números realicé un viaje al pasado. Había teléfonos repetidos, de compañeros de la secundaria que nunca volví a ver, de gente que no puedo asociar con una imagen clara -amistades veraniegas supongo-, ex novias, y algún que otro famoso como Daniel Rabinovich, Rodrigo de la Serna y Charly García, a quienes nunca llamé.
Luego de dos días de trabajo, errores y filtros (la decisión de no pasar el número de una persona con quien se tuvo algún tipo de conexión es mucho más difícil que no aceptarla en alguna red social, créanme) he terminado la faena.
El primer número es de Amnesty Internacional, la Z aún está vacía.   

Día (Im)productivo

Luego de un hermoso fin de semana largo en el Tigre con novia, hermana, cuñada, cuñado y amigos, era tiempo de volver a Capital. Pensaba que este lunes era una buena oportunidad para realizar una serie de tramiteríos antes de que lleguen las vacaciones en la segunda quincena del mes. Salí a las 12 del mediodía bañado y feliz, el calor no me alteraba para nada. Primera parada: Afip. Objetivo: Reempadronarse como monotributista en una nueva categoría ya que en la B voy a tener que pagar más de lo que facturo. Era esperable que no pudiese lograr esta tarea, pero no que me olvidase un libro de Norman Mailer que estaba leyendo. Se lo habrá quedado el pelado que me atendió de forma correcta aunque con cara de 'nene, hubieses venido antes del 31'. Luego fui a la óptica a buscar unos anteojos. La dueña del local me había dicho que estarían cerrados hasta el 4, se olvidó de aclararme que el lunes se incluía en el fin de semana de las fiestas. Debía dejar una factura en otro lugar pero me olvidé el talonario. Venimos bien ¿no?. Esto fue en Constitución. En los pagos de Belgrano fui a una sucursal del banco Galicia para verificar mi saldo. Estaban todas las máquinas fuera de servicio. A esta altura debería haber vuelto a casa pero quedaba un trámite más. Sin darme por vencido pasé por un Farmacity donde pude comprar unas vitaminas y una barra de cerales, no era de Felfort sino de la marca de la tienda sabor de Lemon Pie, bastante aceptable. Con nuevos bríos fui hasta un centro clínico para hacer unos estudios...había que sacar turno. De vuelta en Villa Urquiza pude comprar unos DVD's para hacer el backup 2009 de mi compu y unos cebos mata hormigas. Logré mi cometido final. Rescato haberme tomado toda esta improductividad con bastante serenidad. Este comienzo de Enero laborable y/o vacaciones que no fue ni una cosa ni la otra. Lo inaceptable es llegar a casa y que el aire acondicionado chorree agua para adentro.